El Cerco sigue su destacada trayectoria en festivales de todo el mundo, entre los que destacan la Berlinale, donde recibió el premio UIP al Mejor Cortometraje Europeo, y la candidatura a los Premios de Cine Europeo.
La película, filmada cerca de Cádiz, muestra durante 12 minutos la almadrava, un aparejo de pesca milenario introducido en la Península por los árabes: “Cada año, miles de atunes se adentran en el Mediterráneo. La mano del hombre los ataca en un ritual de muerte y sangre: 300 atunes caen en la trampa de les redes. Atemorizados, salpican con sus colas hasta convertir el círculo en una enorme cortina de agua. Imágenes de una naturaleza desbordada”.